Las relaciones interpersonales pueden ser de distintos tipos, algunas de carácter superficial y otras de más estrechas, como la que se necesita entre el médico y su paciente, en la cual el médico debe estar dispuesto a brindar su ayuda en forma humanitaria y sensible pero también el paciente debe estar comprometido a cumplir y colaborar con lo que se requiere.
La RMP (Relación Médico-Paciente) puede ser clasificada en tres formas distintas:
- Relación de cooperación guiada: es aquella en la que el paciente está dispuesto a dejarse guiar por el médico y cumplir con el tratamiento.
- Relación activo-pasiva: es aquella en la que uno de los dos no asume responsabilidad, por lo que los esfuerzos no dan resultados al recaer en únicamente en uno de los dos.
- Relación de participación mutua: en este tipo de relación tanto médico como paciente asumen un rol activo, el paciente además de seguir a cabalidad las indicaciones del médico, participa y se involucra en la toma de decisiones en cuanto a su salud.
Recuerda:
- El respeto ayuda a establecer relaciones más cercanas con el médico.
- Para que la relación médico paciente sea efectiva se necesita el modelo de participación mutua.
- Reconoce al médico como alguien que desde su profesión esta para brindarte ayuda.
- Sé honesto con él en todo momento de esa forma te podrá ayudar mejor.
- No te retires de tu cita sin haber consultado todas tus dudas.
Una buena relación con el médico garantiza el éxito de tu tratamiento
Investigado por: Freddy A. Espinosa
Fuente: http://bit.ly/2cPtVqY